viernes, septiembre 29, 2006

CONFITURA DE PLÁTANOS, NARANJA Y CHOCOLATE

Esta receta creo que la de la mejor mermelada que he hecho nunca, y creo que llevo unas cuantas hechas, realmente estoy encantada con ella, es una receta de éxito total. BUENA, BUENA. BUENA.

Esta receta está sacada de un pequeño libro que compré en Paris, Mes Confitures, de Christine Feber, no es demasiado caro, creo que me costó entre 5 y 6 euros, y es realmente magnífico, todo de confituras ordenadas por la temporada en que es propia la fruta, así es más fácil conseguir los ingredientes. El libro es totalmente aconsejable, vale su precio, así que si os interesa, lo podeis comprar fácilmente en Amazon.fr, por ejemplo.



Vista de la marmita, antes del último hervor.




CONFITURA DE PLÁTANOS, NARANJAS Y CHOCOLATE
MES CONFITURES, de Christine Ferber
Editorial J´ai Lu


Ingredientes:
1 kg de plátanos
6 naranjas de zumo, para tener 300 ml de zumo de naranja
750 g de azúcar + 200 g adicionales
El zumo de un limón
250 g de chocolate negro, del 68 % de cacao.
2 naranjas sin tratar.
100 ml de agua.

Lavar muy bien, y aclarar las naranjas las naranjas sin tratar, secarlas y cortarlas en rodajas tan finas como sea posible.
Exprimir las naranjas de zumo, y reservar el zumo. Exprimir el limón, y reservar el zumo
Pelar los plátanos, eliminar los hilillos y cortarlos en rodajas de un centímetro de grosor. Poner las rodajas en la marmita de mermeladas, añadir el zumo de naranja y el zumo de limón, con mucho cuidado, mover los plátanos hasta que se impregnen de los zumos. Dejarlos en reposo.
En una cazuela ancha, poner el agua y los 200 g de azúcar. Calentar muy suavemente, y moviendo hasta que se disuelva el azúcar. Añadir las rodajas de naranja y llevar suavemente a ebullición y mantenerla hasta que las naranjas queden traslúcidas. Tirar el líquido de maceración, ya que amarga.
En la marmita de los plátanos, añadir el azúcar y llevar suavemente a ebullición, hasta que el azúcar quede totalmente disuelto. Añadir el chocolate troceado en pequeños daditos, y seguir calentando con mucho cuidado para que no se pegue.
Retirar del fuego, añadir las rodajas de naranja, mezclar y mantener en un lugar frío o en la nevera una noche, tapado.
Al día siguiente, calentar muy suavemente, sin dejar de remover, hasta que llegue a ebullición. Mantener la ebullición 10 minutos, retirar del fuego y proceder a embotar como de costumbre.








En esta foto, ha quedado un color un poco extraño, la mermelada es marros "chocolate", pero se vé bien el detalle de las naranjas

¿A que apetece meter la cuchara? Siento que a través de Internet, no se pueda oler, es francamente delicioso.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Riquiiiiisimo!!!! Hecho, catado y aprobado por costillo :D