Esta es la guarnición favorita para mi familia. Acompaña cuanquier cosa, y de por sí, ella misma puede ser un excelente primer plato.
Pongo patatas cortadas en rebanadas no demasiado gruesas y cebollas laminadas. La proporción aproximadamente que uso es de un peso de cebollas por dos pesos de patatas. Una vez cortadas, las mezclo bien con la sal y la pimienta, les pongo un buen chorro de aceite por encima y lo espolvoreo con hierbas provenzales. Una horita de horno a 180ºC, y a la mesa.
Si no queremos que se dore, podemos hacerlo con una lámina de papel de aluminio por encima, queda mucho más blandito y de un color más suave.
1 comentario:
Coincido en que se trata de uno de los mejores acompañantes: ademas estas tienen una pinta!
un beso!
andrea
Publicar un comentario